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Finalizada la vuelta al mundo toca escribir un libro y sacar mis fotografías a la luz...
Información: es de Barcelona, España y vive en Barcelona, España
Ocupación: Aventura, deporte y cooperación
Edad: 37 años
Idiomas: Castellano, Catalán e Inglés.
Trayecto: Taree - Bulahdelah
Distancia recorrida: 97 km
Tiempo circulando: 5:44 horas
Media: 16,5 Km/h
Tiempo: Sol y de nuevo viento en toda la face
Nos despertamos al amanecer y las fotos junto al río no sé hicieron esperar. Bella casa y mejores vistas. Después de eso nos dieron un desayuno para afrontar una maratón: un plato con dos huevos fritos, bacon, medio tomate y pan tostado. Un auténtico plato de energía para recorrer kilómetros y kilómetros a buen ritmo.
Una vez el plato estuvo vacío y la charla fue concluyendo, terminamos de recoger el material y nos pusimos en marcha entre despedidas y recomendaciones de recorridos.
Como somos muy obedientes les hicimos caso al cien por cien y a pocos kilómetros de empezar a surcar la Pacific Highway nos desviamos por la ruta turística 8, llamada Lake Way. No era para menos ya que, una vez pasado el pueblo Tuncurri, todo fue pasear entre lagos y mar y, aunque el camino se puso difícil por las subidas, las vistas y los lagos bien merecían el perder algo de tiempo en el camino.
Nos cansamos muchísimo en el recorrido antes de volver, 90 kilómetros después, a la vía principal; pero valió el sacrificio. Además, en el siguiente pueblo llamado Bulhdelah, el destino quiso darnos otro regalo más conociendo a Jim: un viudo que había sido pianista nos ofreció su jardín, después de probar en otras dos casas sin mucha o nada de suerte, ya que uno de los que nos atendió nos recomendó preguntar directamente a la policía, cosa absurda y sin sentido.
Pero Jim nos abrió las puertas de su jardín y de su casa ofreciéndonos también una ducha y la cocina para que Demian preparase pasta con atún riquísima para los dos. Después de la nutritiva cena nos esperaba lo mejor: Jim nos deleitó con un concierto personalizado, con cientos de canciones antiguas en el teclado, con el que recorrió media Australia, para despedir con la mejor de las músicas un día agotador lleno de belleza y disfrute
Pertenece al diario: La vuelta al mundo
25 / 03 / 15